Es un hotel hermoso, con excelente variedad de alimentos, muy cómodo, con vista panorámica al aeropuerto, a pesar de lo cual NO se transmite el ruido de los aviones.
Una enorme ventaja dentro de todos sus atributos, es que tiene acceso directo al aeropuerto, cosa que en un hotel del centro de París, hubiera sido un gran problema.
El personal muy amable. Es el mejor hotel en el que me he quedado en Europa