“Un hotel muy còmodo en el corazòn del casco històrico de Zuric, rodeado de muchas tiendas, restaurantes, a unos pasos del lago. Muy bonito, con detalles como fruta en tu recàmara. El desayuno incluido nos sorprendiò, delicioso y muy completo. El café capuccino riquísimo. Todo el personal con mucho don de servicio y atenciòn al cliente.”